sábado, 24 de diciembre de 2011
Sentados en la orilla del mar...
...con la brisa fresca rozándonos la piel suavemente, con las olas del mar rompiendo a un metro de nosotros, con el dulce atardecer enfrente. Sin nadie a nuestro alrededor. Hablando de cosas sin sentido, riéndonos sin saber por qué. Tal vez simplemente, sonriendo. Sonriendo por el simple hecho de que estamos uno al lado del otro. ¿No suena genial? ¿De verdad no te gustaría estar formando parte de un momento así? Tú y yo hablando con el sonidos del mar de fondo. Y en uno de nuestros momentos de silencio besarnos con la arena acariciando nuetsros pies. Tumbados en la playa. Jugando como nosotros solo sabemos. Intercambiando miradas que lo dicen todo, por que no necesitamos palabras. con un simple guiño de ojos decimos todo. Ahora sin embargo nos encontramos de pie, en esa misma playa. Jugando al escondite entre las rocas. Yo me escondo, tú me buscas. Como si se tratara de un juego de niños. Me siento, acurrucada entre dos rocas pensando que no me vas a ver. Tú pasas de largo gritando mi nombre. Yo me acurruco aún más sin saber que tú ya te has dado cuenta de mi presencia. Solamente quieres hacerme feliz. Por fin, haces como que te sorprendes y gritas "¡Te vi!". Corres detrás de mi para rodearme entre tus brazos. Yo al verte corro también, pero sin ganas porque lo único que quiero es que me cojas, que me abrazes como tú solo sabes, que me quieras. Logras alcanzarme, me abrazas. Justo loq ue yo quería. Me siento bien. Con leves movimientos te vas acercando a mí. Yo me dejo llevar. Poco a poco y sin que casi me de cuenta tus labios rozan los míos. Siento un pequeño cosquilleo y me estremezco. Tú te das cuenta y me agarras de la cintura para comprobar que es verdad. Cierto, otro cosquilleo me recorre el cuerpo seguido de otro estremecimiento. No lo puedo avitar. Sonríes. Te divierte verme de ese modo. Te gusta hacerme sentir así. Te sientes especial. Y lo eres. Seguimos uno pegado al otro, como si de una película romántica se tratase. Mirándonos a los ojos. Miradas de deseo...y no sabes cuánto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario